miércoles, 8 de febrero de 2017

Sorpresa

Empecé mi camino en esto de Twitter en abril de 2016. No tenía muy claro porque quería abrir una cuenta ni para que iba a utilizar este perfil, yo siempre he sido de Facebook.
La inquietud me venía dada por la necesidad de ayudar a mis Ong's con algo más que no fuera dinero, algo que me hiciera sentir implicada aunque solo fuera de manera simbólica. Evidentemente, la visibilidad que tengo es de pena y no creo que les sea demasiado útil pero, la que se siente más útil soy yo.
Afortunadamente me encontré con la generosidad absoluta de la gente de Unicef, gracias a ellos me siento más importante de lo que en realidad soy.
Todo esto es para intentar poner en antecedentes para lo que quiero explicar en realidad, perdón por los circunloquios!!
Hasta ahora, casi un año después, mi visibilidad ha aumentado un poco, inexplicablemente. Pero, para mi sorpresa, ha subido más cuando he empezado ha hablar de temas políticos!!
Me dije que mi perfil de Twitter no iba ha servir para eso, que no le daría publicidad, aunque sea microscópica a políticos en los que no creo pero ha sucedido algo que me ha hecho traicionar mis principios. Y no me refiero solo a la victoria surrealista de Trump en la elecciones americanas. El avance de líderes radicales en países con un gran peso específico en el orden mundial me asusta y, por que no decirlo, me cabrea sobremanera.
Muchas de las decisiones de estos psicópatas metidos a políticos hiere mi sentido de la justicia por que son completamente arbitrarias, crueles, en oposición completa a los Derechos Humanos.
Y entonces, resurge de dentro una figura que yo creía que con la edad y las decepciones estaba muerta y enterrada, la "activista política"!!!.
No, tranquilos!! Que no cunda el pánico!! No me he vuelto de repente la reencarnación del "Che" Guevara. Solo que, de colgar twitts sobre la necesidad de ayudar en las campañas de apoyo a refugiados entre otros, he pasado a intercalar críticas a las maniobras desleales y traicioneras de estos psicópatas seudo políticos.
En definitiva, lo que me duele es que sean más visitadas estas críticas que otras cosas que para mi son más importantes. Perdonar, no quiero que esto suene a desagrado o decepción, pero me confirma el poco interés que el sufrimiento de otros provoca.
Espero que, a partir de esta entrada, no empecéis a pensar que soy algo así como una meapilas, y os aseguro que el monstruo político no se va a comer al monstruo solidario. Intentaré que convivan los dos y los que visitáis mis twitts sigáis haciéndolo, aunque me gustaría que fuera indiferentemente unos que otros.
Salud compañer@s

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